miércoles, 5 de septiembre de 2012

El Tránsito, tema de todos los días...



El transito en los países desarrollados tanto como en aquellos en vías de desarrollo es un inminente enemigo de vida para la población. Siendo en Uruguay la tercera causa de muerte por detrás de enfermedades cardíacas y tumores malignos, con no menos de 600 muertes registradas en el 2011 además de cientos de lesionados y perjuicios materiales cobrados por estos casos infortunios.
 
A nivel global la causa de muerte por consecuencia de accidentes automovilísticos se lleva nada más y nada menos que una suma de 1,2 millones de fallecidos al año. Cave destacar que el 90 % de las muertes se originan en países subdesarrollados y cerca del 46 % son aquellos individuos altamente vulnerables al impacto directo, hablamos de: peatones, motos, ciclistas, etc.
En este ambiente como en otros, las causales de accidentes pueden ser varias. Una persona que trabaja hasta altas horas todos los días puede perder la integridad y caer en sueño mientras conduce, o que un animal se interponga en la senda por donde avanzan vehículos a gran velocidad, o quizás por más que un individuo posea el documento que lo habilita a conducir, aún no es realmente lo suficientemente seguro para identificar señales de transito o resolver determinadas situaciones que pueden -en caso de salir fallidas- provocar daños a segundos. Claro está que estas son solo unos ejemplos en modo puntual, atendiendo a la realidad de que los accidentes tienen como principales causas el alcoholismo, el estrés, la neurosis y la depresión de los conductores que circulan día a día dominados por la rutina.

El automóvil fue creado con el fin de tener un medio de transporte que no dependa de la fuerza animal, y que sea más ligero, ágil y cómodo, capaz de transportar a más cantidad de personas por viaje. Haciendo de este un artefacto deseable por sus propiedades benignas.

Sería complicado concebir que en un evento público, por ejemplo en un estadio o parque se reunieran de a miles con el método de llegar con un carro a caballo. No solo sería un descontrol, sino que el estado en el que los animales se encontrarían sería lamentable.
A raíz de sus ventajas para transladarse para quienes poseen un automovil, es imprescindible tener el medio en cual puedan circular, por ello hoy en día se pueden ver que las calles se extienden, con más desembocaduras y que son cada vez más anchas. Se expande el concreto a nivel del suelo, por debajo y por sobre el mismo. Puentes, carreteras, túneles...

Sin mucho misterio, el hombre convive con este medio de transporte a diario, adaptándolo a un estilo de vida. Si una persona necesita transladarse rápidamente a un punto o varios consecutivos en especial, seguro que ésta no pondría en duda el subirse a un auto cuando un amigo, un pariente o quien fuere le ofrece darle un aventón. 

Claro, la locomoción del transporte público delimita los horarios, hace vulnerable a tener problemas de inasistencia a cientos en sus o estudios, se prolonga el transcurso del recorrido debido a constantes interrupciones que pueden ser ocasionados por semáforos o por las mismas paradas de ómnibus ya que en todo momento, sube y baja gente. Retrasos que aumentan hasta un 70% el tiempo en llegar a destino comparado un medio con otro.  
Por ejemplo un montevideano que habita en inmediaciones del Portones Shopping puede demorar cerca de 45 minutos en llegar al centro (sobretodo en horas pico 7:00-12:00-19:00hs.) Entonces, la necesidad del citadino en poseer su propio vehículo aumenta con el correr de las décadas y se ha convertido en una tarea a cumplir.
 
En las sociedades se han visto incrementadas las enfermedades traumáticas debido a los siniestros en el tránsito. A raíz de estas coliciones los damnificados pueden resultar con simples lesiones y no pasar a mayor intervención médica, pero en gran parte de los casos dichos infortunios traen consigo consecuencias irreversibles en las personas que participan.

Un 33% de los jóvenes menores a 34 años que mueren prematuramente lo hacen por motivos de este tipo.
En Uruguay puntualmente la tasa promedio que contabiliza las muertes a causa de choques automovilísticos es muy elevada, dado que se registran unas 14 defunciones entre cada 100.000 habitantes. 
 
Vale destacar que Uruguay tiene una población envejecida y que la natalidad no es la mejor, ya que va en decadencia. Desde 2003 a 2011 la natalidad bajó unos 3.900 nacimientos. En los registros del 2011 se contabilizaron unas 13.520 con relación a 2003 que fueron unas 17.420.  

En que inside esto?
En que la cantidad de afectados por los accidentes lleva a elevar el porcentaje en la tasa de población que se ve perjudicada por de estos hechos.

Para lograr prevenir accidentes, es necesario partir por la base de comprensión de cada persona. Cada individuo es parte de la vía pública cuando se está en la calle, no importa si la persona va caminando, en camión o en moto. Lo realmente necesario es que se cumplan las normas de tránsito impuestas exclusivamente para cuidar la integridad de los ciudadanos. Además ser prudentes y evitar que al ser el conductor de cual sea el coche, que esté en buen estado pero sobre todo que quien lo conduce, también lo esté... Sin ingerir sustancias que puedan afectar la capacidad de reacción y ser consciente de que el estrés y el mal humor son síntomas de distracción que llevan a perder el control del vehículo en situaciones que no demandarían mucha habilidad.
 
Se recomienda la sana incorporación de otros medios de transporte más seguros, menos costosos, y por sobre todo más saludables, como lo son bicicletas, rollers, longboards. además de la correcta utilización del transporte público.





DIEGO SPINELLI

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